Durante la celebración del torneo High Roller del EPT de MonteCarlo, Gus Hansen no apareció en las mesas en el día 2 para continuar con el torneo.
Esta actitud de Gus no era extraña, puesto que otras veces ha optado por sentarse en el tapete una vez pasados los primeros niveles, así que al principio nadie se extrañó.
Pero finalmente, el jugador danés no apareció. Quedaban 41 jugadores para optar por el primer premio de casi un millón de euros. La entrada del torneo era de 25.000 euros, así que parecía extraño que el jugador renegara sin motivo aparente de luchar por el primer premio.
Según el comentarista del evento
Fue ya durante el desarrollo de la mesa final cuando se descubrió por qué Gus Hansen no se presentó a la continuación del torneo. Según el comentarista del evento, el jugador se encontraba en su habitación jugando a backgammon con un millonario ruso. Parece ser que hasta ese momento el danés ya le llevaba ganados dos millones de dólares, así que pensó que era más rentable quedarse en la habitación que bajar al casino para proseguir con el torneo High Roller.
